Características físicas y geográficas. Superficie del terreno y reparto

El terreno, para la instalación de un Glamping, debemos plantearlo como un espacio natural y agradable, generalmente amplio, que pueda albergar la infraestructura necesaria de uso común como una oficina de atención, una cafetería o un comedor, un aparcamiento y espacios independientes para cada cliente desde donde puedan ver la salida del sol al empezar el día.

Si además de contar con vegetación, hay, rocallas, diferentes alturas, cascadas o riachuelos, nos acercaremos al entorno ideal y no digo nada si estamos cerca de lagos o playas. Sera un espectáculo que siempre recordaremos

Todos los detalles cuentan

Un Glamping tal y como lo imagino acercándolo a la idea de naturaleza libre, no debería estar acotado. A lo sumo pantallas vegetales naturales formadas por arboles y arbustos del propio terreno.

A la horade optimizar nuestro negocio, tendremos que tener en cuenta otras circunstancias como la temperatura media a lo largo del año, las horas de luz, la altura con respecto al nivel del mar, o la cercanía a otras poblaciones. Grutas naturales, lugares históricos, arquitectura con encanto o espacios propios para la aventura.

La cercanía a una población, casi siempre va a tener dos caras. Una buena, la que nos permitirá disponer de algunos servicios como agua y electricidad, indispensables para desarrollar nuestra actividad, compras de materias primas y gente cercana que pueda echarnos una mano. La menos buena, el pago de impuestos que habrá que valorar a la hora de hacer nuestras cuentas.

Si estamos perdidos, alejados de la civilización, tendremos que dotar al terreno de una infraestructura que nos permita generar electricidad, hacer acopio de agua y dar cobijo a nuestro equipo humano a cambio eso si, de impuestos menores.

No siempre vamos a tener la suerte de encontrar el terreno ideal

Si disponemos de un erial, yermo, vacío y sin vegetación, no nos va a quedar mas remedio que echarle imaginación y convertirlo en un lugar suficientemente atractivo. Que ofrezca los mejores ingredientes de las poblaciones cercanas, potenciando las posibilidades de todo lo que se pueda hacer en ese entorno.

Hablando de dimensiones, tenemos que partir de una superficie mínima de ocho a diez mil metros cuadrados. Debería contarse al menos con seis espacios de 600 m2 para cada habitáculo, sea cabaña, refugio o tienda de campaña.

1.000 m2 para servicios comunes, la infraestructura de la que hemos hablado al principio y 500 m2 para aparcamiento además del espacio necesario para accesos y caminos. Un reparto para empezar, que haga viable económicamente la actividad.